lunes, 24 de octubre de 2016

Sensación Hecha Objeto

Partimos de la propuesta conceptual “Música hecha objeto”, pero desde un comienzo al intentar abordarla nos encontramos todos atrapados en lo sonoro, en el instrumento, en el objeto que emite ruidos/sonidos/notas. Entonces como grupo decidimos sacar ese límite para ampliar el espectro de lo abarcable por el concepto y expandirlo más en el mundo de los sentidos y las sensaciones.

Y ahí nos perdimos en una nube conceptual de la que no podíamos bajar.

Percibimos el mundo desde los sentidos, habitamos y creamos un universo de sensaciones distintas. Y en los niños todo esto está potenciado, para ellos todo es estímulo, todo es nuevo, todo el tiempo.

Encontramos un camino de regreso al plano de lo concreto al intentar abordar el concepto, ahora llamado “Sensación hecha objeto”, desde pensar las propuestas en base a un abordaje desde tres enfoques perceptivo-sensoriales distintos pero extremadamente vinculados. Desde nuestra propuesta apuntamos a estimular lo Emocional, lo Espacial y lo Corporal. A reforzar desde los objetos los vínculos entre personas, objetos y espacios.

Y se trata también de generar en el niño la posibilidad de experimentar y crear a partir de los objetos, permitiéndole personalizar el juego y hacerlo propio. Se trata de diseñar experiencias y objetos que permitan transformaciones y cambios, en el objeto mismo y en el espacio que éstos configuran.


Enfoque Emocional
“Caras y Curvas”



Se buscaba plantear un espacio en que el niño exprese sus emociones a través del juego, de generar una familia de objetos que abarque distintas experiencias de uso unidas desde un enfoque emocional. Planteando así una serie de objetos que configuren el espacio, otros que se muevan en el espacio, y otros que impliquen un juego al nivel del piso.

Enfoque Espacial
“Planos y Volúmen”



En esta propuesta se planteó hacer foco en generar objetos de doble funcionalidad (juego y mobiliario). En objetos creadores de espacios y usos, de situaciones y sensaciones.
Y una familia de objetos unida además por una morfología que partía de formas geométricas básicas.

Enfoque Corporal
“Figuras y Movimientos”



Este enfoque aborda la propuesta desde de la motricidad, desde el movimiento del cuerpo.
Así, la familia de objetos abarca la motricidad fina, la acción manual, así como también el movimiento del cuerpo en el espacio, con el andador/carrito y las colchonetas.

Maraña de Curiosidades (Bajada 1)

El trabajo final comprende una búsqueda en grupo, un debate y una puesta en común de diferentes roles que ejercemos por momentos, simples instantes con compleja búsqueda. El grupo rige, la voluntad está. Volcados en ser parte de un fin que puede ser productivo o no hacía muchos sectores, no solo dentro del aula, de nosotros mismos.
Somos marañas en nuestras cabezas, somos curiosos en nuestras miradas, nuestras marañas y nuestras curiosidades son diferentes. El trabajo en común como piezas del mismo equipo tiene que llevar a pulir las ideas. Perdón lo redundante de este texto, pero qué configuramos de maraña y qué vemos como curioso en el sentido “físico” de la palabra: “Encrucijada / Enredar las cosas”, salen del primer concepto, “Investigación / Interés” del segundo. Este es el medio donde nos encontramos y desde acá trabajamos condicionantes ya establecidos, otros dados,  propios.


Pensemos al niño a partir de sus inquietudes, ahí  donde surge el aprendizaje. Es una necesidad propia, de apropiarse de un mundo nuevo. La investigación es constante, esta no se impone. Algo que cuesta mantener con el tiempo, por esos días está a flor de piel, la sorpresa. El mundo, si bien es orientado por la burocracia de la vida que impone el adulto, es propio de cada ser. Y ahí saltamos al rol del mayor, del tutor, de un contexto que delimita, el hogar. Lleno de carencias y virtudes como todo submundo. Los hermanos son muchos, los espacios personales quien sabe dónde estarán. Las visitas al hogar de algunos de nosotros se fueron dando y sumaron puntos a tomar en cuenta, “los chicos antes de usar cualquier cosa la investigan”, “la infraestructura del hogar no está en las mejores condiciones”, “los adultos rápidamente les dicen que tienen que hacer ante un objeto pseudo complejo”, “juegan cada uno por su lado”.

En fin, por estas charlas llegamos a este medio, al punto en común: La curiosidad debe ser libre, sin reglas, independiente de todo lo ajeno a uno mismo, para que la sorpresa no esté atada a nada, a nadie y pueda estar presente en todo.  La tengo que poder resolver yo mismo. Con mis manos, a mi alcance, la tengo que poder vivir. Tengo el derecho a observar, tomar mis propias conclusiones, cambiarle la configuración a las cosas. Lo investigo por mí mismo, lo adapto a mi interés, pero lo comparto con un todo, con mis hermanos, con el mundo que me rodea, no paso por encima.  La subjetividad tiene que ser, crecer, vivir y convivir con otras subjetividades. Entrelazar los aprendizajes, sin imposiciones. Esta es nuestra intención: “De lo individual a lo colectivo”.  

No se si se dan cuenta que esto que trabajamos entre todos es lo que nos define a nosotros mismos, en estos momentos, donde investigamos, donde nos liberamos de dar las cosas por sentado y nos enmarañamos en otras subjetividades.  Vení con nosotros, achicate, ponete en escala, liberate del libro que escribiste y tomás como verdad, sentate acá en el piso si te animás.


Propuestas:

CUBOS DE ENCASTRE:

Familia de productos, cubos de diversos colores, forma geométrica básica y trama compleja.  Donde se estimule la imaginación a partir de las capacidades del niño de interactuar con el objeto. El tacto en los más chicos, el arrastre luego, los que puedan levantarlos apilarlos y/o encastrarlos hasta terminar en un desarrollo mayor donde los mayores puedan en común construir de a varios un sistema. La configuración no tiene ninguna regla. Los objetos se guardan encastrándolos en la pared y/o unos con otros. La maraña no es visual sino tacita, consta de entrelazar los conocimientos, la posibilidad de interactuar por uno mismo o aprender del espejo en el otro que ya descubrió otra posibilidad al lado, indistintas las edades de cada uno.


VÍBORA:
 

 
 Sistema de víbora con uniones y texturas. Un sistema de módulos con diferentes estímulos pasados por un alambre que hace a su vez la función del alma que contiene y articula la forma. El niño puede desarrollar la libre interpretación de la funcionalidad, unir varios y conectarse con otros, experimentarlo físicamente enredándose en uno o más conectados en formas aleatorias. El tacto, el encastre, el juego con la forma son motores de muchos desarrollos, la motricidad tanto fina como gruesa pueden entrar en juego.

ENCASTRANDO ENREDO:

Elásticos con módulos encastrables. Tiene dos forma de encastre/apoyo, por medio de los tubos o por las medias esferas que se encastran en concavidades complementarias. El usuario podrá generar figuras expandiéndose tanto horizontal como verticalmente. No posee piezas o elementos figurativos, lo que permite estimular la imaginación en cada combinación realizada, sin regla. Para la hora del guardado, se colocan las piezas en una caja de tapa transparente dispuesta en la sala principal (comedor/sala de juego). Los elásticos visualmente quedan entrecruzados porque las figuras en bajo relieve permite el encastre específico de determinadas figuras, induciendo el entrecruzamiento.
Se incentiva el uso del juguete ya que el niño visualiza el objeto al entrar a la sala por poseer la tapa transparente y colocada de frente a la altura del piso.

sábado, 22 de octubre de 2016

Reflexión

El jueves pasado me pidieron que hable de mi opinión acerca de la modalidad en la que se está trabajando en la clase. Además que haga una auto devolución. Obviamente lo que voy a decir me concierna a mí en especial, pero con suerte espero que puede llegar a servir a alguien más.

A veces es difícil saber el eje por donde transcurre el trabajo colectivo. Nos perdemos luego de volver empezar, es más creo que ese es el problema, siento que el trabajo vuelve a empezar. Ser incapaz de ver un final a un trabajo o un cierre me bloquea. Me eh pasado toda la vida haciendo trabajos prácticos que terminan y no se vuelven a tocar que ésta modalidad, esta libertad de trabajo me asusta. ¿Será porque la libertad de expresión significa abrirse con los demás? En el sentido de las ideas, claro. Esta libertad es emocionante, da curiosidad, pero sobre todo es aterrador. Parecería como si la libertad nos juega en contra, pero eso no es verdad. Lo que nos juega en contra somos nosotros mismos. Nosotros somos los que nos ponemos límites. Nosotros somos los que decimos, mañana lo haré y para entonces paso una semana, un mes, un año. Porque el cambio se genera desde nosotros. Es por eso que a veces me cuesta hablar en algunas reuniones. Yo me pongo los límites y en estos residen el ¿que pensaran de mí? Es decir, la libertad me da paso a expresar mis ideas, y estas ideas a su vez tienen potencia de ser juzgadas, algo que aterra y que no queremos que pase, por lo que nos ponemos límites.

El trabajo en grupo da una fluidez en las ideas que solo se logra trabajando con dos o más mentes. Una vez que alguien propone una idea, al instante alguien interviene con otra idea y así hasta llegar a un resultado que nos conforma a todos. El hecho de que todos tengamos diferentes enfoques hace que el trabajo a su vez crezca en complejidad y que, a nuestro criterio, tenga sentido.

En mi grupo, en especial, creo que se trabajó de manera ordenada. Siempre nos tratamos de juntar para decidir cómo iban a ser nuestras propuestas. Por mi parte ayudaba con los dibujos de las láminas y con la aportación de ideas. Lo único de lo que no me quede satisfecho (algo que se habló en clase) fue en que faltó dar cuenta del proceso. Es como si todo lo que hicimos antes fue en vano. Es el proceso de convergencia y divergencia lo que nos faltó. Es el proceso del diseño, algo a lo que nos tenemos que acostumbrar si queremos ser diseñadores en el futuro. El problema de la libertad radica en la forma en que se sucede este proceso: es cíclico. Si fuera lineal, tendría una historia que no mira hacia atrás y solo hacia delante. Siempre teniendo en claro cuál es su final. Pero en realidad el diseño da vueltas. Se vuelve en sí misma. Sigue y vuelve a comenzar. El final es incierto, pero (si se tiene paciencia) seguramente  será satisfactorio.